Mi nombre es Wilma Corio, soy puertorriqueña y vivo en Ohio. En muchos momentos de mi vida, batallé con el sobrepeso, pero en realidad lo que hizo que pierda el control con la comida fue cuando me mudé a los Estados Unidos. Quería salir adelante en este país y con dos trabajos y una hermosa familia, ponía de excusa que no tenía tiempo para cuidar mi alimentación. Solo me alimentaba de comida rápida, como pizzas y hamburguesas, y llegué a pesar 180 libras y ser talla extra grande. Vivía ansiosa por visitar mi isla, pero no imaginaba que mi sobrepeso haría de ese deseado momento uno muy doloroso. Después de cinco años, regresé a Puerto Rico y lo único que llamaba la atención era lo gorda que estaba. En una isla donde solo puedes usar cortos y ropa de playa, no había cómo esconder mi gordura. Sin embargo, esos tristes días hicieron que tomara la decisión de recuperar mi vida. ¡He bajado 50 libras! Me siento linda, feliz de regresar a robar miradas y ser un orgullo latino que dice Yes You Can!.